El ejercicio es importante para las personas con síndrome de Marfan, ya que genera numerosos efectos beneficiosos:
- Reduce la presión arterial y ayuda al fortalecimiento cardiovascular.
- Reduce el peso.
-
Regula el metabolismo y la función digestiva.
-
Aumenta la densidad ósea y la masa muscular.
El déficit en la fibrilina (FBN-1) ocasiona un cuerpo más débil y en los individuos afectados por el síndrome de Marfan se requieren unas modificaciones en el ejercicio a realizar:
-
La mayoría de las personas con síndrome de Marfan deben hacer ejercicio de baja intensidad regularmente (a un nivel aeróbico de trabajo en el 50-60 % de su frecuencia cardiaca máxima).
-
Las actividades de bajo impacto deben ser adaptadas para satisfacer sus requisitos específicos ortopédicos, cardiovasculares y oftalmológicos.
-
Si no hay evidencia de dilatación de la aorta, se puede permitir actividad en niveles superiores de intensidad.
-
La ausencia total del tono muscular y la hiperlaxitud REQUIEREN ejercicios de fortalecimiento. Hacer ejercicios con un pesas (1-2 kg), de 15 a 20 repeticiones cómodamente.
-
Evitar actividades relacionadas con mucho peso o esfuerzo isométrico intenso.
BIBLIOGRAFÍA (para los posts "Rehabilitación en el síndrome de Marfan: tratamiento de la afectación musculoesquelética" y el actual de "Síndrome de Marfan y ejercicio físico").
- 1. Weber WF, Jeffrey DL, Weigel KW. The marfan syndrome: implications for rehabilitation. J Reh 1992; 40-43
- 2. Iams HD. Physical educations goals for children with marfan syndrome.J Med Genet 2010 67: http://www.marfan.com/marfan/
- 3. Loeys B, Dietz HC , Braverman AC, et al. The revised Ghent nosology for the Marfan syndrome. J Med Genet 2010 47: 476-485
- 4. Garrote C, Iglesias-Garriz I, Martin J. Síndrome de Marfan. Sociedad Aragonesa de Cardiología.2007 Vol 10, nº 2